+Septiembre
1991+
Alexandra:
¿Qué quieres que te diga? ¡Si te extraño mucho! (Dije dándole la espalda) Quería
verte y…
Michael:
¿Y qué? (Dijo detrás de mi)
Alexandra:
De verte y besarte.
Sin
decir nada voltee a verlo, el solo me sonreía con su perfecta dentadura blanca,
se acerco lentamente a mí y yo cerré mis ojos, esperando a que sus labios tomaran
los míos como hacía mucho tiempo que no lo hacían, pero después de un tiempo
esos labios que tanto añoraba no se acercaban, abrí los ojos y mire a mi
alrededor y después lo mire ahí, besando a Graciela en mi cara, ella se estaba
colgando de su cuello y se lo comía a besos, después se separaron y me miraron.
Alexandra:
¿Qué les sucede? ¿Por qué me hacen esto? (Dije con rabia)
Michael:
Crees que de verdad venia a buscarte para volver contigo (Dijo riendo)
Graciela:
Acéptalo Alex, yo sé cómo tratar a un hombre y enamorarlo (Dijo acariciando el
pecho de Michael) Tu pierdes tus oportunidades.
Alexandra:
Ustedes dos son…
Michael:
Solo es la verdad, yo me canse de ti, ella si me ama, ella si me valora, ella
me da lo que tanto quiero.
Dijo
y la volvió a besar, yo quería salir de ahí y correr, correr y alejarme para no
mirar lo que sucedía pero no podía moverme, solo me quedaba ahí mirando y no
podía hacer nada, pero de la nada me levante en la cama, había sido otra tonta
pesadilla, me levante de la cama y me mire al espejo, tenía la cara de siempre,
asustada y de enojada, como no iba a estar así, volvía a recordar y me llenaba
de odio y rencor.
Trate
de olvidarme de ese sueño y me comencé a arreglar, cuando termine salí de mi
casa, pues ahora estábamos aquí en Los Ángeles, pero yo había comprado una casa
aquí con mi s ganancias, donde traje a vivir a Regina y Miguel, pero seguía de
gira.
Traía
una chamarra con gorro y este me cubría la cabeza solo dejando algunos mechones
de cabello salir y mirarse, mis ojos los cubrían unos lentes grandes, que no
dejaban ver casi nada de mi rostro.
Comencé
a caminar sin rumbo alguno, queriendo despejar mi mente, sin ver por dónde iba
mis pies me llevaron a un lugar muy lejos de mi casa, pero que rápidamente reconocí,
comenzaba a caminar por donde vivía, mire a mi alrededor y no había cambiado en
nada.
Con
miedo seguí caminado, mirando para todos lados, pues todo lo que miraba estaba
igual, los arboles, las casas, todo, seguí caminando y llegue a donde tanto
quería, a la casa de mis padres, miraba desde lejos a lado de un árbol, seguía
el hermoso jardín y las mismas cosas fuera de la casa.
No
quería alejarme de ahí, quería ir a esa casa y tocar la puerta, decirle a mi
madre y a mi padre que los quería y que me perdonaran por ser tan idiota y haberlos
dejado por él, pero no podía, no tenía el valor de tocar esa puerta, me quede
cerca de una hora ahí parada sin hacer nada, hasta que vi como la puerta del
garaje se abría, de ahí salió un auto, me imaginaba el de mi madre, ya que ella
iba manejándolo, yo comencé a caminar alejándome, pero ella paso por mi lado y
bajo la velocidad, yo seguí caminando como si no pasara nada, hasta que bajo el
vidrio y toco la bocina del auto, yo voltee y ella se me quedo mirando.
Hilda:
Oh lo siento (Dijo ella desanimada) Pensé que eras alguien más.
Alexandra:
No se preocupe (Dije cambiando un poco mi vos)
Solo
me sonrió y volvió a cerrar su ventana, arranco su auto y se fue, yo seguí
caminando y no dejaba de ver el auto hasta que se perdió de mi vista, seguí
caminando y llegue a la casa de Sabrina, estaba a unas cuadras de la casa de
mis padres, también me quede ahí un rato hasta que vi que salió con Mercedes,
iban platicando pero en sus caras se reflejaba un poco de tristeza, me acerque
a escuchar lo que platicaban, claro sin que ellas me miraran.
Sabrina:
¿Supiste algo nuevo?
Mercedes:
No nada, está muy grave, al parecer le queda muy poco de vida (Dijo muy triste)
¿Has sabido algo de lo otro?
Sabrina:
No, llevo mucho buscando pero no… Alexandra tiene que saber lo que está pasando
(Dijo frustrada)
Mercedes:
Lo sé y el tiene que verla antes de que esta enfermedad lo consuma.
Yo
me quede completamente helada, de quien estaban hablando ¿De Michael? No, el no
le podía pasar nada, solo comencé a caminar alejándome de todo, lentamente mis
lagrimas comenzaron a salir por mis ojos de solo pensar que algo malo le podía
pasar a Michael.
Comencé
a correr alejándome de los recuerdos, alejándome de los malos pensamientos que
ahora inundaban mi cabeza, simplemente huyendo como lo hice aquella vez.
De
un momento a otro llegue a un parque donde me senté en una silla a descansar,
pues había corrido demasiado, solo me quede ahí sentada con los lentes puesto y
sin querer mirar más que a la nada, poco a poco fue oscureciendo el día y así que
decidí levantarme de aquel lugar, comencé a caminar tomando camino hacia mi
casa, en ese momento solo iba pensando en lo que había escuchado, ¿Podría ser
que Michael se estuviera muriendo? Volvían mis lágrimas a mis ojos de tan solo
pensar esa tontería.
Después
de mucho tiempo llegue a mi casa, había pasado todo el día fuera y Regina y
Miguel se habían preocupado mucho, estaban en la sala esperándome.
Miguel:
¿Te encuentras bien?
Alexandra:
(Suspire) Si, solo no tuve muy buen día.
Regina:
(Miro a Miguel y luego a mi) Alex vino David (Lo mire estaba un poco escondido)
Creo que necesitan hablar.
Alexandra:
¿Es necesario ahora? (Dije con un poco de fastidio) No me siento muy bien.
Regina:
Si, lo es.
Alexandra:
Muy bien (Mire a David) Por favor sígueme.
Nos
alejamos y entramos a mi estudio, podría ser que ya había cansado a David con
mi frialdad, pues me había convertido en una persona que no expresaba mucho sus
sentimientos, eso a cualquiera cansaba, cuando entramos nos sentamos en una
pequeña salita y lo mire esperando a que hablara.
David:
Esto es muy importante y necesito que me escuches… es sobre tu familia.
Alexandra:
(Me levante del sillón) No, simplemente no quiero escuchar nada ¿Si?
David:
¡Pero por favor! Tienes que escuchar…
Alexandra:
¡Ya te he dicho! ¡No quiero escuchar nada de mi familia!
David:
Es que esto es importante.
Alexandra:
Ya me cansaste ¡Eh dicho que no!
Salí
enojada del estudio y él me seguía y gritaba que yo tenía que escucharlo, que
me detuviera, pero no le hacía caso, caminaba rápido y comencé a subir las escaleras.
David:
¡Tu padre se está muriendo!
Me
detuve en seco a media escalera, solo miraba hacia arriba y me negaba a
voltear, después de unos segundos lleve mi temblorosa mano a mis lentes oscuros
y los quite de mis ojos, me di la vuelta, lo mire él se encontraba en el inicio
de la escalera, solo me miraba y ya no decía nada, yo me enoje y baje enseguida
y me acerque a él.
Alexandra:
Estas mintiendo (Dije golpeando su pecho) ¡No mientas David!
David:
(Me tomo de las manos) No estoy mintiendo (Lo mire con los ojos llorosos) Desde
hacia tiempo quería decírtelo y no había podido, tiene cáncer y se está
muriendo.
Alexandra:
¡No! ¡No, el no se puede morir!
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!
ResponderEliminary DICES QUE NO QUIERES MATARME?!! DIOS SANDY JACKSON BARONE ERES TAN GENIAL QUE ME HACER MORIR CON TODO ESTO NONONO TU SEGUIRLE YA!
QUE FEO SUEÑO MAS BIEN ERA UNA PESADILLA, Y DESPUES LO DEL PAPA POBRE OJALA SE ARREGLE ESTE ASUNTO Y SE RENCUENTRE CON MIKE ES EL UNICO QUE LA PUEDE CONSOLAR ATTE DIANA...
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